La mano de obra estadounidense se bate en retirada, ante las fuerzas de la globalización que disminuyen sus salarios y su protección social
Trabajadores en un piquete durante el paro de transportes en Nueva York. Una escena que será cada vez más frecuente en el hasta ahora llamado "Primer Mundo". Foto: AP. Por: David Streitfeld, Los Angeles Times Traducción para @DIN de Susana Merino Esta semana la empresa Delphi Corporation, fabricante de autopartes, ha planteado a sus trabajadores la reducción de sus salarios en dos terceras partes. Es una de las concesiones salariales más radicales que se haya jamás solicitado a empleados sindicalizados. Al mismo tiempo los trabajadores de la General Motors Corp. aceptaban financiar "provisoriamente" de sus bolsillos miles de dólares relacionados con sus coberturas de salud. Los empleados de Ford Motor Co. y Daimler Benz enfrentarán seguramente similares exigencias. Las fuerzas que golpean a los trabajadores de Delphi y de GM son versiones extremas de lo que está sucediendo en el mercado de trabajo estadounidense, en el que los riesgos económicos tales como el dese